Five Go (Almost) Mad: Entrevista a Take That

Se han embarcado en el tour mas grande jamás realizado en Gran Bretaña. Aún Take That está preocupado: Sobre perder el cabello, del pánico escénico, pero por sobre todo de cansarse del otro, otra vez.

Le acaban de pedir a Robbie Williams que hable de si mismo a los 16 años: “¿Cómo era?”  Comienza este único hijo de una familia rota. “Tenía voz aguda, sonaba un poco como una mujer. Hablaba un poco con el acento de Stoke, era tremendamente ingenuo. Tremendamente confiable e inconfiable al mismo tiempo. Una muy, muy mala combinación. Obtienes tu lugar” Añade con un guiño.

Entonces, ¿Cuál era su talento? “El exceso de confianza. No había mucho mas.” Pero en 1990 ese talento, tal como lo era, lo llevó a ser el miembro mas joven de una nueva banda de chicos que estaba siendo preparada por un empresario musical de Manchester: Take That.

Es Febrero del 2010, Williams –Ahora voluminoso, con muchos tatuajes y multimillonario –  y yo estamos sentados en un lujoso apartamento en el hotel Chelsea Harbour de Londres. Williams ha volado desde su casa de Los Ángeles para recibir el premio  “Outstanding Contribution” en los Brit Awards. Será su Brit número 16, el último galardón de una exitosa carrera como solista que comenzó luego de que abandonara Take That en el verano de 1995 en una nube de alcohol, drogas y cabello decolorado.

Los miembros restantes de la banda –Gary Barlow, Mark Owen, Howard Donald y Jason Orange- harían lo mismo solo un año después. Ninguno de ellos tuvo un éxito como solista del que hablar. Pero después de un comienzo vacilante, el single de 1997, Angels, salvó la carrera de Williams. Robbie logró vender 60 millones de copias de sus 8 discos, rompió records de taquillas con sus giras y firmó un contrato con una compañía discográfica por £80 millones. También ha ido a rehabilitación varias veces.

¿Pero ahora? Williams admite que su brillo se está desvaneciendo. “Ya no soy tan brillante” El dice, pero admite que todavía no ha caído. “Pero no soy omnipresente, todo lo conquista el pasado Robbie Williams.”

La cosa es que el no está preocupado “Tengo planeado algo impresionante preparado para finales de año. Separado de mi. Y es muy, muy, muy emocionante.” Uno de sus managers le pide que no de mas detalles.

Pero como tantas otras veces, Williams no puede controlarse y abre su portátil para mostrarme dos de sus nuevas canciones que ha escrito con Barlow, el macho alfa de Take That quien ha pasado 15 años abusando del público. Su manager niega con la cabeza. “¡Eres una bestia!”

Estamos en un estudio de grabación y de ensayos en el sur de Londres, es Mayo del 2011. Cinco maridos y padres están sentados alrededor de una mesa de conferencias durante una mañana soleada. Los miembros de Take That ahora con edades comprendidas entre los 37 y 43 años, y lo están haciendo bien. No hay mucha calvicie masculina aquí. Williams dice: “Estoy mucho mas delgado de lo que solía estar.” [Señala hacia arriba].

Barlow: “Creo que lo soy. Lo pensé cuando vi al Príncipe William, el está perdiendo el cabello, ¿No?”.

Williams: “Yla Realezano puede ir y cubrírselo tampoco. No es la cosa hecha, ¿No?”

15 meses después de nuestro último encuentro, Williams sigue siendo “Una bestia”, pero al parecer está aprendiendo a controlarse un poco. Una vez más, después de 15 años, tiene otras 4 personas en las quien pensar.

Pero ahora, la nueva y excitante cosa de la que apenas podía guardar silencio es viaja pero aún sigue haciendo titulares. En Septiembre del 2009, el y los miembros restantes de Take That se han reunido en secreto en Nueva York para comenzar a trabajar en un nuevo álbum. Sería el primero con la banda original desde que en 1995 lanzaron Nobody Else.

El pasado Julio se anunció que Robbie había vuelto a la banda y en Noviembre la banda lanzó el álbum Progress, una brillante fusión sólida de la banda, un álbum pop con sonidos mas audaces y electrónicos.

Con 5 semanas en el mercado, Progress se convirtió en el álbum mas vendido en Gran Bretaña en el 2010 y en el álbum que mas rápido se ha vendido en el siglo 21. En el momento en el que Take That no podía ser mas exitoso, lo hicieron.

Un mes después de que el álbum se lanzara, la banda anunció su nuevo tour: el Progress Live 2011, un tour europeo que llenaría estadios. Esta sería la primera vez en 16 años que  la banda completa compartiría estadio. Sería la gira mas ambiciosa del país y la mas exitosa de la banda.

Pero, ¿cómo? Su última gira fue The Circus, una que la banda como cuarteto realizó para promocionar el álbum con el mismo nombre. Construido alrededor de pantallas fantasmagóricas de teatralidad (la banda aprendió a usar un monociclo), el espectáculo fue clave en el aterrizaje de su equipo de detrás de escena ( El director creativo fue Kim Gavin y el diseñador de teatro fue Es Devlin) el trabajo de elaboración de la pantalla de clausura en los Juegos Olímpicos de 2012. También tuvo un elefante.

“Todos se preguntan ‘¿Cómo van a superar el último tour?’” Dice Owen, quien sigue siendo el ‘pequeño Mark’, el lindo, su lindura y memorable calidad se vio opacado el año pasado por los tabloides cuando salieron las afirmaciones de su alcoholismo y una lista de infidelidades. El también fue el pacificador y mediador entre Barlow y Williams – los ‘dos lideres’- y quien se acercó con cautela en la época en la que el cuarteto estaba haciendo The Circus durante el verano del 2008 en Los Ángeles.

“Esa es la pregunta que muchas veces me hacen por la calle.” Owen continúa, “Para nosotros era importante dejar eso a un lado y comenzar con un nuevo show. Así que es muy diferente a The Circus.” Ok, entonces ¿Cómo el Progress Live podrá ser mejor que el The Circus Tour?

En este punto, durante los ensayos de Progress, tres semanas antes de que el tour comience, la banda es cautelosa con respecto a la información que dan. “Durante toda la semana nuestro director nos ha enviado fotos, quien está en otro lugar [Donde ensayamos] y al cual iremos después de aquí.” Dice Barlow en forma cuidadosa pero muy confiado. Algo más de lo que no hablará Barlow es sobre los rumores de que ya está confirmado como juez para la nueva temporada del show de talentos, The X-Factor. (La confirmación fue dada por Simon Cowell días después).

“Estamos ensayando aquí con la banda, tocando las canciones en sus respectivos orden.”  Añade, “Porque necesita fluir como una pieza musical tal como en el show.”

“¡Josie!” Grita Robbie llamando a su manager. Está situado contra una ventana abierta así el puede fumar y –apenas dos minutos de comenzada la entrevista- ya está a todo volumen alrededor de Barlow.

El quería que Josie consiga un conductor que vaya a recoger a Ayda Field, la actriz americana con la que Robbie se casó el pasado Agosto en su mansión en Los Ángeles.

Barlow continúa valientemente: “El ha enviado estas fotos de nuevo y se ve fantástico. Absolutamente brillante.”

En este nuevo Take That, todos los miembros tienen la misma importancia. Pero, ¿Son algunos mas importantes que el otro? Williams aún mantiene su manager aparte y su representante de prensa. Además, durante el Progress Live, el tendrá su momento como solista. El show de 3 horas se inicia con un acto de mimos, seguido por la banda soporte Pet Shop Boys. Y luego, Owen, Organge, Barlow y Donald salen al escenario como un cuarteto para hacer una breve presentación, seguidos por la parte solista de Robbie que consta de 5 canciones. Finalmente, la banda completa sale al escenario para seguir el show.

Esto podría ser perfectamente visto como ofrecer a los apostadores un show de calidad por precio. Y un reconocimiento tácito a una política real. –Después de todo en Enero Barlow dijo que estaban volviendo a ser la banda original pero que en un futuro seguirían como una banda de cuatro.-

Igualmente, se plantea si la vuelta de Williams tiene un precio. Y parece que no siempre se comporta. Hay un video en YouTube de la banda tocando The Flood, el primer single de Progress, en el Festival de Música de Sanremo Italia en Febrero y en él, Williams cambia la letra de la primer linea de la canción: “standing on the feet our Trevor, but our Trevor was clever…”

La letra sin sentido generó una discusión en Internet, incluso en el foro de los fanáticos de la página web de Williams. Según se informa Robbie se había peleado con uno de los jefes del festival y se negó a ensayar con sus compañeros de banda.

Hoy, en el sur de Londres, la banda insiste en que todo va viento en popa. Ciertamente, hay demostraciones públicas de afecto: cada miembro mostrado alegre por todos los demás. Sin embargo, Williams admite que, antes de que comenzara  los ensayos, él tuvo que pedirles unas sinceras disculpas a Gavin, quien ha trabajado con la banda desde principios de los noventa.

“Kim Gavin pensó que yo era un grano en el culo. Y por el trabajo que tenía que hacer en ese momento, eso es comprensible. Porque no me aplicaba a mi mismo. Pero ahora tengo una gran relación con Kim. Y me estoy aplicando.”

Owen añade: “Lo único que importa es hacer el mejor espectáculo posible. El entusiasmo por hacer un gran show es lo que siempre nos ha enorgullecido y eso no ha cambiado ahora”.

Prosigo con la preparación de Williams para la gira. El año pasado me había dicho que el miedo escénico lo había abrumado  y todavía es un problema. “Hice un viaje y una gran cantidad de personas vinieron a verme”, dice de su tour del 2006, por el que vendió 1,6 millones de entradas en un día. “Mordí mas de lo que podía masticar y me doblaron.”

Él dice que es “un poco como esa sensación cuando estás de pie en el balcón y te crees que vas a lanzarte off”. Y añade: “Durante muchos años fue un poco como saltar de un avión y no saber si el paracaídas iba a abrir”.

Él dice que es “un poco como esa sensación cuando estás de pie en el balcón y crees que vas a lanzarte”. Y añade: “Durante muchos años fue un poco como saltar de un avión y no saber si el paracaídas se abriría.”

Ahora le vuelvo a leer esas citas a Robbie. Poco más de un año después, ¿Esos sentimientos acerca de las actuaciones han cambiado? “Han cambiado dramáticamente. En ese momento no sabía que estaba enfermo. Y las cosas han cambiado desde que voy al médico. Y ahora se lo que es y está clasificado” El ha mencionado esta extraña dolencia antes, que lo ha dejado con fatiga crónica, pero se niega a elaborarla.

“Y tienes un paracaídas ahora, ¿verdad?” – Murmulla Orange

“Tengo un paracaídas” Dice Williams inexpresivamente, “Eliminé los balcones. Ahora si algo es ligeramente negativo o destructivo para mi, puedo deshacerme de ello.” ¿Cómo? “Um. Bueno, estoy un poco equilibrado ahora. Así que acabo de conseguir una superficie buena para actuar. Y es como que ahora todo tiene sentido. Y, ya sabes, este es mi trabajo. También es mi medio de vida. También, en el pasado, he sido bastante bueno en eso, porque la gente ha ido a verme. Y yo estoy bien. Estoy relajado. Listo para viajar. Listo para volver arriba.”

“Usando calcetines naranjas” dice Owen, mirando los pies de Williams.

“Usando calcetines naranjas”, afirma Williams.

Lo primero que ven los fans al entrar al estadio donde será el show del Progress Live, es una torre de30 metrosque es un torso humano detrás del escenario principal. Sus brazos están extendidos y sostienen pantallas y equipos de audio. El es, dice el diseñador Devlin, literalmente “el show todo junto”. El pasado otoño el, Gavin y Take That se marcharon a un hotel rural de las afueras de Londres.
Pasaron cuatro días pensando un montón de ideas. Orange había estado mostrando un álbum de recortes de periódicos y muchos de los “conceptos fundamentales” del show fueron sacados de ellos, y de los bocetos de Owen. Con todos los teléfonos apagados durante ese tiempo, también escucharon con atención las canciones del álbum.

“Hay una dirección muy clara para la pieza”, dice el director de teatro aclamado por su trabajo con Lady Gaga, Pet Shop Boys yla ENO.“Hemos hecho cientos de dibujos de teclados de computadora, permutaciones y variaciones de un hombre gigante en un extremo de la cancha, un gigante de la informática en el otro, un teclado en el centro. Luego volvíamos a la idea de la ruptura de una presa. Eso se convirtió en algo muy importante de la letra de The Flood.”

La tecnología, o “El progreso del hombre desde el mono hasta el astronauta”, es el tema principal y la coreografía será menos caótica que la de The Circus. “Vimos un montón sobre la polcía militar de Corea del Norte y videos de entrenamientos de artes marciales”, añade Devlin. “En un momento estábamos pensando en un elenco masculino, pero al final no lo hemos hecho.” Devlin dice que el presupuesto es “más del doble” del que se utilizó para The Circus, y algunos informes indican un presupuesto de £50 millones. (Lo cual puede explicar la necesidad de Samsung como patrocinador)

Al final, la narrativa es de una pieza con la historia de Take That. Progress Live es sobre cinco hombres, y los altos y bajos que tuvieron durante su viaje. Se conocieron cuando eran jóvenes y sobrevivieron a una fase inicial desafortunada como adolescentes vistiendo de cuero. Veinte años después de su debut en The Hitman and Her, ellos se vuelven a encontrar – contra viento y marea, contra la historia de su carrera – la banda más grande de Gran Bretaña.

El espectáculo termina con Eight Letters, la canción final de Progress. “Es más bien una canción expuesta; todos ellos cantando con todo el corazón, y diciendo: ‘Estamos juntos, lo que sea que traiga como consecuencia y sin importar lo que hemos dicho el uno del otro en el pasado – pero estamos juntos porque nos amamos.’”

El efecto, dice Devlin, “es casi espiritual. Puede sonar cursi, pero nosotros no creemos que lo sea”.

O, como Williams lo describe: “Este espectáculo es un gran show. Realmente lo es. Golpe tras golpe tras golpe tras golpe tras golpe.” De vuelta en la sala de ensayos, los cinco miembros de Take That no tienen ninguna ilusión sobre lo que está por venir. “Es un trabajo difícil”, admite Barlow. “Hay cinco de nosotros. Todos tenemos nuestros pequeños árboles genealógicos al salir de aquí todos los días. (Él, Donald Owen y tienen siete hijos entre los 3). Es un equilibrio difícil de conseguir al salir de gira durante 3 meses. Es un gran trabajo. Es un gran trabajo”, repite.

Pero son adultos ahora. Es la primer gira “sobria” para Owen,  y está ansioso de tomar aún mas de esta experiencia. Cuando Take That volvió a reunirse hace seis años, Orange buscaba un “cierre” después de todos los problemas de la primera vez – “Pero ya no creo en eso. Todos los días estamos trabajando para poner las cartas sobre la mesa – pero no pones todas tus cartas sobre la mesa. Estamos tratando de hacerlo lo mejor que podamos y estamos mucho mejor. Pero aún así siempre tenemos nuestras pequeñas quejas, esas pequeñas inseguridades. Y ese es nuestro reto, así como la música y los espectáculos. Nuestro reto es seguir llevándonos lo suficientemente bien como para hacer buena música y buenos shows.”

¿Son estos cinco mosqueteros todos para uno y uno para todos? Sin dudas lo están haciendo. Pero, llegado Agosto, una vez que el tour ha terminado, todos se toman unas vacaciones, ¿Williams está corriendo a las colinas de Hollywood de nuevo? Los 5 se escapan con elegancia, aunque a Owen deja escapar algo “Rob va a estar haciendo algo por sí mismo, espero que sea para el próximo año”.

Pero, añade, la nueva funcionalidad de  Take That es que la banda sea como una “puerta giratoria” ya que cualquiera de los miembros puede entrar o salir. “Excepto por mí” Bromea Barlow. “No sería lo mismo sin mí”, añade en tono de broma (más o menos).

Pero en cuanto a si su hijo pródigo volverá al ruedo nuvamente – para, por ejemplo, la banda se rumorea que participará en el Diamond Jubilee Concert el próximo año parala Reina- los otros cuatro no se dibujarán. Pero Williams, no inusitadamente, se muestra optimista: “Bueno, no estamos lejos de nuestro aniversario N° 25, ¿No? Escucha, pase lo que pase, esto es algo que quiero hacer de nuevo. Allí,” asiente con la cabeza. “Lo he dicho.”