También tuvimos el placer de presentarte alguna de las canciones nuevas de Robbie y esta semana volveremos a hablar de una de esas canciones originales, una que co-escribió junto a Guy Chambers y Chis Heath. Esta, junto con la canción que le da título al álbum, es una de sus favoritas de Swings Both Ways.
“Me felicito a mi mismo por esta canción. Es graciosa, parte de su tiempo y grande, tonta y caprichosa. Y amo la melodía.”
Con el estilo del órgano Wurlitzer y grandes vocales, No One Likes A Fat Pop Star logra una gran, audaz y dramática declaración musical. Esta maravilla de una canción sonaría bien en casa como el punto culminante de la puntuación de un musical del West End. Esto es algo que Robbie quería lograr, y lo ayudó a motivarse aún mas para escribirla, todo de una forma descarada.
“Es graciosa. Es, básicamente, sobre mi burlándome sobre la obsesión que tienen los medios por el peso y, también, sobre mi obsesión por mi peso. De hecho, directamente sobre la obsesión con el peso. Es algo grande, algo con una gran producción para un tema estúpido y tiene un gran coro.
Swings Both Ways ya está a la venta en todas las tiendas de música del país en su versión estándar y también está disponible para su compra digital por iTunes Argentina, tanto en su forma estándar como en la deluxe.